La huelga fue anunciada en un comunicado en el que los sindicatos de estatales también anuncian “acampes, panfleteadas, ollas populares y charlas de concientización sobre el conflicto”.
La de esta semana será la cuarta protesta desde que Mariano Arcioni asumió como gobernador chubutense, el 1 de noviembre de 2017, en reemplazo del fallecido Mario Das Neves, en medio de una crisis económica y denuncias de corrupción que investiga la Justicia.
Durante las movilizaciones se harán “panfleteadas”, ollas populares y charlas de aprendizaje en “el acampe”, una marcha con velas en todas las ciudades con entrega de un petitorio a intendentes y concejales y hasta un “cacerolazo”, precisó el comunicado sindical.
Este viernes se cumplirá un mes del “acampe” que los estatales mantienen cerca de la sede del Gobierno chubutense, que permanece con vallas y una fuerte custodia policial.
“El acampe permanecerá hasta que se dé respuesta a nuestros reclamos”, señalaron desde los sindicatos de docentes, trabajadores del sector sanitario, judiciales, empleados de la Legislatura y de otras áreas de la Administración Pública que forman parte de la Mesa de Unidad Sindical.
Los estatales de Chubut comenzaron a cobrar el sueldo de manera escalonada el mes pasado. La modalidad de pago para los estatales consiste en liquidar los haberes a quienes cobran menos de 30.000, y hacerlo a mitad de mes para los que cobran entre 30.000 y 50.000 y en la última semana para los que cobran más de 50.000 pesos.
Los gremios repudiaron la medida del Gobierno de exceptuar del pago escalonado de sueldos a la Policía del Chubut, y a raíz de esto pusieron en duda que la Provincia no tenga recursos para pagar a todos los sectores. Consideraron que esta política del gobierno "discrimina entre ciudadanos de primera y de segunda".
Fuente: www.infogremiales.com.ar